Lucas Rivet completa el cruce del Río de La Plata
En su segundo intento, el nadador pudo concretar el cruce del Río de la Plata en 14 horas .
El cruce del Río de la Plata, es una de las hazañas más emblemáticas de la natación en aguas abiertas, ha sido conquistado por un grupo de nadadores de diferentes nacionalidades a lo largo de la historia.
La primera que cruzó fue una mujer, fué el 21 de diciembre de 1923, llamada Lilian Gemma Harrison necesitó 20 horas y 40 minutos para cruzar los 42 kilómetros.
El río más ancho del mundo, que separa a los dos países hermanos Argentina y Uruguay, presenta condiciones difíciles y desafiantes, convirtiéndose en un verdadero campo de pruebas para aquellos que se atreven a cruzarlo.
Lucas Rivet de 46 años se preparó meticulosamente, nadador del Campo 1 de San Isidro e integrante del equipo de masters Aquateam, ademas participó de la carrera de Aguas Abiertas en Nordelta entre tantas otras.
Es portador de una determinación inquebrantable, se lanzó a esta aventura en busca de superar sus propios límites y alcanzar la gloria de ser parte de aquellos hombres y mujeres que cruzaron el río más ancho del mundo.
En cuanto a esto nos dice “Estoy convencido de que cada uno de nosotros, cuando tiene la atención, intención y emoción alineados para conseguir algo, lo puede lograr. En mi caso, es cruzar un río de 42 km dentro de 15 horas” y agrega “Al reafirmar que cada una de las cosas que uno propone tiene la intención, si después lo acompaña con la emoción y con la tensión, es posible lograrlo. Y acá estoy, lo que me va a impulsar es el corazón y no la mente”.
La hazaña quedó registrada en un documental que se emitió por DeporTV “Cruce del Plata, historia de un desafío” donde cuenta cada una de sus sensaciones y su conexión con el agua.
En cuanto al documental “Me metí en Google para buscar información y vi que no había nada, me pareció muy interesante contar esa historia porque sabía que había mucha gente que lo había hecho y no se sabía nada de ellos”, explicó Ribet a otros medios.
La travesía comenzó el día 22 de marzo del 2018 la idea era cruzar desde la costa Uruguaya, Lucas Rivet se metió al agua, inicialmente el río no le facilitó la tarea por las bajas temperaturas y lo movido del agua.
Durante el trayecto, Rivet se enfrentó a numerosos desafíos, incluyendo fuertes vientos y corrientes contrarias. A pesar de ello, no dejó que su determinación flaqueara y continuó avanzando. El apoyo y la admiración de quienes lo seguían en su hazaña también jugaron un papel fundamental para mantener su motivación en alto.
Conforme se acercaba a la costa, la posibilidad de que todo concluyera sin llegar a la meta era cada vez más tangible por parte de la Prefectura Naval Argentina y tras 12 hs. y 30 minutos de nado, restando tan solo 8 km. para llegar a la costa se decide dar por cancelado el cruce por falta de visibilidad.
El documental lo deja muy en claro, la frustración de tanto esfuerzo y solo estando a tan poco kilometros de llegar, es más que palpable.
En cuanto a esto tal vez sus palabras lo expliquen mejor “Tiene más que ver con el fracaso que con el éxito pero el mensaje para el es: ¿cuál es el río que cada uno quiere cruzar?, lo que quiero transmitir es que si le pone ganas y empeño se puede lograr lo que uno quiere”, comentó Lucas Rivet.
Aunque el resultado final era incierto, Lucas sabía que tanto el fracaso como el éxito serían simplemente anécdotas al final del camino.
A poco tiempo del primer intento vino la revancha, después de experimentar una mezcla de emociones, desde la inicial frustración hasta una renovada motivación, Lucas Rivet se preparó una vez más para enfrentar el reto.
Prepararse para esta revancha implicó enfrentarse a una montaña de obstáculos, comprender la extensión del camino que le faltaba por recorrer y aceptar el cansancio y sacrificio que eso le llevaría. A pesar de haber recorrido este camino anteriormente, sabía que no sería una tarea sencilla.
El día esperado llegó y nuevamente Lucas Rivet se dispuso a iniciar su travesía por segunda vez el 23 de diciembre del 2018. Con márgenes de seguridad cuidadosamente planificados, tanto en alimentación como en descanso, tanto de día como de noche. Su objetivo era claro: completar la travesía antes de las 18:00 horas.
A medida que avanzaba, Lucas enfrentó momentos de malestar físico, vómitos y dolores. Sin embargo, sabía que eran situaciones normales y temporales, y que con la ayuda y el apoyo de su equipo, podría superarlos. Las dificultades no mermaron su determinación y continuó nadando con fuerza, enfocado en el logro que se encontraba al alcance de sus manos.
La travesía no estuvo exenta de emociones intensas, que supo canalizar y convertir en energía positiva. Se conectó con la belleza del entorno y con el privilegio de estar ahí, así fue como el río se transformó en su compañero, y la serenidad inundó su espíritu.
Con cada brazada la costa se acercaba cada vez más, y la excitación se apoderaba de él. Su equipo lo alentaba, el apoyo incondicional le daba fuerzas para seguir adelante y mantener el ritmo.
Finalmente, después de 14 horas 10 minutos y 42 km. de esfuerzo y determinación, Lucas emergió triunfante, los aplausos y la música celebraron por su logro, que se convirtió en un testimonio de perseverancia y superación personal.
En medio de una atmósfera cargada de emoción, Lucas Rivet sonrió, consciente de que había cumplido su objetivo y dejado su propia huella en el Cruce del Río de la Plata.
Pero Lucas Rivet no solo cruzó el río más ancho del mundo, fue mucho más allá, creó el sitio www.acnrp.com, donde figura cada uno de los protagonistas que lograron concretar el desafío.
Esta travesía desafiante fue mucho más que una prueba física. Lucas Rivet se convirtió en un ejemplo inspirador Fue un recordatorio de que, con dedicación y pasión, los seres humanos pueden alcanzar metas aparentemente inalcanzables.