La soja cayó por debajo de los USD 400
Esta semana, los mercados de granos traen malas noticias para el presidente Javier Milei, el ministro Luis Caputo y los productores argentinos. La soja bajó de precio tanto en Rosario, donde se cotizó a $280.000, como en Chicago, con una pérdida diaria de USD 9,55.
El Gobierno había apostado fuerte a una mejor cosecha tras el impacto de la sequía del año anterior. Aunque el volumen cumplió con las expectativas, los precios internacionales de los granos bajaron considerablemente desde noviembre. Esto, que se esperaba solucionara buena parte de los problemas económicos, sirvió solo para sofocar parcialmente las dificultades.
En el primer semestre de este año, el ingreso de divisas por exportaciones de granos fue de USD 11.000 millones, una cifra similar a la obtenida durante la gestión pasada. Esta situación plantea la duda de por qué los productores no ingresan más divisas.
Hasta el momento fue vendido el 37% de los granos de los seis principales cultivos (soja, maíz, trigo, cebada, sorgo y girasol) de la cosecha 2023/24. Esta cifra es ligeramente inferior al 42% vendido en la misma semana del año pasado. En cuanto a la soja, economistas colocan en torno al 46% de la cosecha de este año el porcentaje vendido, comparado con el 45% en las dos campañas previas y el 49% promedio de los últimos cinco años.
Como resultado, quedan por comercializar más de la mitad de la cosecha de soja, unos 27 millones de toneladas, lo que equivale a USD 11.188 millones a un precio FOB de USD 432 por tonelada. En el caso del maíz, queda un remanente de USD 6.000 millones por vender, aunque parte se destinará al mercado interno. Esto proyecta una liquidación remanente de divisas de aproximadamente USD 13.500 millones.