Conflicto universitario
El gobierno tendrá la semana próxima una nueva prueba de fuego con la marcha convocada por la comunidad universitaria en contra del veto a la ley de financiamiento de ese sector, una movilización que, más allá de los gestos y las negociaciones a contrarreloj, en la Casa Rosada consideraron por estas horas de imposible desactivación.
“Es ‘indesactivable’”, planteó un funcionario del rubro que trabajaba para tratar de bajar la conflictividad en una disputa que, en abril pasado, y producto de la decisión del Ejecutivo de recortar entonces el presupuesto a las universidades, derivó en una muy masiva movilización a la Plaza de Mayo, y que le propinó a Javier Milei su primera derrota frente a la opinión pública.
El próximo miércoles, La Casa Rosada enfrentará la segunda manifestación universitaria con un desgaste lógico tras 10 meses de gestión y un severo ajuste presupuestario en todos los rubros pero en un tema caro al sentimiento de buena parte de la sociedad.
Milei empieza además a perder atractivo en la escena pública, más allá de que todavía concentra el predominio del tablero político. Según el último informe de la consultora Ad hoc, el presidente tuvo el pico mínimo de menciones en el ecosistema digital -6.4 millones- desde que asumió la Presidencia. En febrero pasado, había tenido el doble de menciones.
El gobierno exploró en las últimas horas alternativas para intentar contrarrestar la convocatoria del miércoles próximo.