Salarios dinámicos vuelve a abrir la grieta entre el Gobierno y la CGT
La idea de introducir “salarios dinámicos” surgió esta semana como una propuesta oficial para reformar el régimen laboral, pero no provino del debate central del Consejo de Mayo y generó una fuerte reacción del sindicalismo.
El secretario de Trabajo, Julio Cordero, presentó el concepto en público asegurando que se trabaja hace meses en un mecanismo que diferencie la remuneración según rendimiento: “Los empleadores deben pagar más a los trabajadores que se destacan”. También defendió la idea de que los básicos de convenio funcionen como “techos” más que “pisos”, permitiendo que cada empresa negocie diferencias salariales por desempeño.
Desde la CGT, en tanto, respondieron con dureza. Gerardo Martínez cuestionó que la propuesta es una revalidación del decreto 70/23 “en su capítulo laboral” y advirtió que cualquier modificación debe ser consensuada con los sindicatos.
En el entorno de Cordero admitieron que “salarios dinámicos” aún no forma parte del paquete formal de reforma laboral del Gobierno, sino que sería un punto adicional a debatir, pero remarcaron que proviene de su equipo técnico.
El choque político se instala justo cuando el Ejecutivo pretende avanzar con una reforma más amplia que incluya convenios por empresa, eliminar la ultractividad de los convenios colectivos, y flexibilizar la negociación paritaria.
El debate sobre salarios dinámicos reaviva en el plano público una tensión histórica: hasta dónde el Estado puede incidir en la estructuración del salario nominal y qué margen de autonomía deben tener sindicatos y trabajadores frente a los planteos de modernización laboral.