Se entregaron más de 1.000 tarjetas alimentarias
En febrero había sido la última entrega de tarjetas alimentarias en el Club Atlético Boulogne. Luego, en marzo llegó la pandemia del COVID-19 y la cuarentena estricta, lo que obligó a enviar los plásticos por correo. Tras casi 9 meses, se volvió a la modalidad de manera presencial con turnos y bajo estrictos protocolos sanitarios que implementó el Municipio de San Isidro.
El miércoles pasado se desplegó un operativo con todas las medidas preventivas en el Campo de Deportes Nº1 de Beccar y ayer en el Club Estudiantes de Villa Adelina.
Previamente, se había notificado a los vecinos qué día y horario debían acercarse para evitar aglomeraciones. Los beneficiarios con tapabocas realizaron las filas respetando el distanciamiento social. Al ingresar al predio, se les tomaba la temperatura y se desinfectaban las manos. Ya en el lugar, había puestos de atención, donde personal de la Subsecretaría de Acción Social del municipio brindaba información del programa y el uso de la tarjeta Alimentar.
Luego, nutricionistas indicaban qué alimentos comprar. Se explicaron los beneficios de consumir frutas y verduras, leches, yogures y quesos, carnes y huevos. Con el objetivo de tratar de disminuir el consumo de alimentos procesados con mucha cantidad de sal, azúcar y grasas no saludables.
Finalmente, en el sector del Banco Provincia, se realizaba la entrega del plástico. No se permitió el acompañamiento de personas junto al titular y, entre fila de espera y entrega.
“Fue un operativo eficiente y rápido, nos sentimos muy cuidados con los protocolos. En este momento tan difícil me viene muy bien esta ayuda”, sostuvo Karen Martínez, vecina de Beccar, que tiene una bebé de un año.
La Tarjeta Alimentar que forma parte delPlan Argentina contra el Hambre, se otorga a beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) con chicos de hasta seis años, a beneficiarias de la Asignación por Embarazo y a personas con discapacidad que cobran la AUH.
La tarjeta, permite a las familias beneficiadas comprar alimentos (excepto bebidas alcohólicas), pero no extraer dinero de los cajeros, como los plásticos tradicionales o la Asignación Universal por Hijo.
Así, pueden acceder a 13 rubros de la canasta básica, con fuerte predominio de carnes, frutas y verduras.
El intendente Gustavo Posse supervisó la entrega de tarjetas alimentarias junto al subsecretario de Asistencia Crítica del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Gustavo Aguilera, en el Club Estudiantes de Villa Adelina.
“Es un operativo muy organizado en un municipio que está comprometido en el cuidado de sus vecinos. Esta fue una ampliación de las tarjetas que habíamos entregado en febrero. El plan acompaña a la gente en una situación crítica por la pandemia, y a su vez, promueve el consumo interno con la compra de alimentos”, indicó Aguilera.
Por su parte, Posse agregó: “Cuando hay un problema como el del hambre, el Estado es uno solo. Trabajamos todos en conjunto con estatura política para facilitarle la vida a la gente”.
El programa, que intenta aminorar las dificultades de los sectores más vulnerables para acceder a los alimentos básicos de la canasta, tiene un tope de $4000 para las familias que tengan un hijo y hasta $6000 para quienes tengan dos o más menores a cargo.
“Esta tarjeta me viene muy bien, porque soy madre soltera y se me dificulta muchísimo llegar a fin de mes. El operativo estuvo buenísimo”, contó Victoria Ledesma, vecina de Villa Adelina.
Para aquellos beneficiarios que no pudieron retirar su tarjeta Alimentar, a partir del 16 de noviembre podrán hacerlo en la sede Acción Social de San Isidro en Don Bosco 411, de lunes a viernes de 8:00 a 14:00
Para más información se pueden comunicar al 4512-3174/75/77 o enviar un mail a [email protected]